FOLLOW ME

FOLLOW ME

Escucha este Pan Diario aquí:

Hace más de 15 años tuve la oportunidad de vivir en Estados Unidos, era la primera vez que andaba sola en el vehículo y solo tenía que ir al super mercado, pero entre inmensas carreteras tomé la salida incorrecta y de pronto el camino me pareció tan diferente que me di cuenta que estaba bien perdida.

Para ese entonces no tenía celular con «waze» ni «maps» que me ayudara a regresar, lo único que tenía era un mapa de papel que no sabía interpretar, me sentí angustiada, sin saber como regresar. Por la impotencia de no poder pedir pedir ayuda, pues no hablaba inglés fluido, y frustrada de tener la herramienta del mapa pero no saber cómo usarla, finalmente llena de temor oré al Señor para que me guiará y me regresara al camino correcto para llegar a casa, pasaron pocos minutos y llegó a mi ayuda un policía que con muy pocas palabras entendió que estaba perdida y solo me dijo la palabra mágica FOLLOW ME (Sígueme).

De la misma forma el salmista nos da esa linda enseñanza en respuesta a la petición de un corazón sincero, en el Salmo 25:

«Señor, enséñame a vivir a tu manera. Muéstrame el camino que tú seguirías.»

Salmo 25:4 PDT

Esta pequeña petición encierra dos elementos, que entendí cuando me perdí:

1️⃣ Humildad: Debía reconocer mi error, saber que estaba perdida y lejos de donde era mi meta a llegar, estaba sin dirección todo por tomar el camino incorrecto en un momento de descuido.

2️⃣ Temor reverente: Aquella figura policial de autoridad me dio temor porque sabía que podía sancionarme si me equivocaba, pero más que juzgar mi error fue mi ayuda en el momento más angustiante. Honrar y respetar la guía que el Señor te da solo traerá ganancia a tu vida, te llevará a su presencia y dará paz.

«El Señor guía a quien le teme y respeta. Lo guía por el camino que conduce a Dios.»

Salmo 25:12 PDT

Muchas veces el orgullo nos llena de autosuficiencia que nos impide reconocer que estamos equivocados y que somos necesitados de la guía del Señor, muchas veces el camino errado nos parece bonito y diferente pero nos aleja del lugar seguro, nos aleja de nuestro propósito, nos desgasta, o sea nos quema la gasolina, las ganas de vivir.

Deje que el Señor te guíe, permite que el te indique la manera correcta de vivir y encontrarás la verdadera plenitud.

-Pastora Cleyra Rodríguez Cubillo-